miércoles, 28 de noviembre de 2012

Harlem tales ( II )

Cuando se te cae la tarjeta de metro mientras sacas la cartera, cuando la recoges y ves que te faltan 130 dólares que llevabas en la cartera hacía un momento, piensas que algo ha pasado. Cuando viene un negro del Harlem (de las películas) gritándote no se qué, y una mujer a su lado moviendo las manos como si te fueran a sacar los dientes de un guantazo, crees que algo ha pasado y estás en una situación complicada..

Pero afortunadamente,  lo único que querían era devolverme el dinero que ellos habían recogido en la escalera. Thank's man ! .......Estuve apunto de decir I love you.....e invitarle a algo...

Eso fue hace mucho, en las primeras semanas de agosto.También veíamos malos tipos por aquí, ahora también pero te acostumbras. Hay mucha policía. Y por a la ley stop-and-frisk te pueden parar y cachear por aparentar ser sospechoso y llevar al calabozo. El 90 % de los detenidos han sido hispanos o negros, y la mayoría de las actuaciones son en el Harlem o en algunas zonas de Brooklyn. Nueve de cada diez personas detenidas son puestas en libertad sin cargos.

Quién es el policía y quién no




4 comentarios:

  1. Hmffinyc!!!:

    Pues no es mal barrio el tuyo, porque si la poli se pasara por Wall Street seguro que los puestos en libertad sin cargos serian 1 de cada 10.

    El problema es que no se pasa. Y se se pasa es para hacer de escolta de los delincuentes.

    Lo dicho, "esta vida loca, loca, locaaaa..."

    Besos,

    Marisol

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  2. Qué razón tiene Marisol, y lo que cuentas me recuerda una conversaciónque teníamos la semana pasada con, entre otras personas, Eva que viene a decir que el mundo se mueve por amor y hay más gente buena que mala, afortunadamente para nosotros. Ah! también es importante recordar el topicazo de que las apariencias engañan, porque lo que menos esperabas es que aquellos dos negritos chillones estuvieren haciéndote el favor del día.
    Besos

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  3. Ay.... qué razón tenéis ¡¡¡

    besos gordos ¡¡

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  4. Se empieza a dudar de la honestidad de las buenas gentes de Wall Street y se acaba faltando a misa. Haced el favor, que esos pobres nunca han hecho mal a nadie. Carlos, te rogaría que controlases los comentarios de los que visitan tu blog. Seguro que el negro que te devolvió la pasta trabajaba en algún banco...

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