The guests

Y como han venido cansados del viaje, ¡ nos dejan salir esta noche !

Beds

En Ikea, en Brooklyn, encuentras gente normal, lejos del contraste de personajes que se suelen ver en Manhattan, donde se ve que hay mucho dinero y también mucha miseria, en el Harlem negro, en Chinatown , el dowtown blanco o en el hispano uptown.

En Ikea, en Brooklyn, las camas no están hechas, pero sí puedes tumbarte cómodamente e incluso dormir. Hemos visto un tipo que estaba  durmiendo tranquilamente en una de las camas litera, y nadie decía nada.

From east to west

Las calles de Manhattan, desde el downtown hacia el norte, están distribuidas en una cuadrícula de doce avenidas (hay otras pocas que van en diagonal, como Brodway) y 215 calles sin nombre propio, sólo el número que las identifica. Parece ser que el origen de esta famosa distribución reticular data del año 1811 y la idea de identificar las calles con números era dar un sentido democrático a la ciudad.

Esta tarde hemos ido al este de la isla, a la rivera del East River. Un lugar lleno de embarcaderos con barcos preparados para fiestas privadas,  helipuertos e hidroaviones. Después hemos cogido un autobús que ha recorrido toda la isla por la calle 44, desde la primera avenida hasta la doceava, para ir a parar a la orilla del río Hudson donde está atracado un portaaaviones  (¡!) reconvertido en museo, y aunque lo hemos visto sólo por fuera, impresiona.

Cuando el sol se ha ido por el oeste hemos vuelto al piso del Harlem, que como ha dicho Sofía, ya es como nuestra casa (del este).

The health center

Para poder ir a la escuela o guardería en NY  los niños deben presentar un documento donde quede demostrado que han pasado una revisión médica completa con su correspondiente análisis de sangre, y cumplen los exigentes requisitos en cuanto a vacunas. Algunos colegios disponen de una especie de centro de salud propio donde se pueden hacer estas revisiones, pero no en el nuestro.

Así que, después de mucho preguntar estos días pasados para enterarnos de cómo y dónde podíamos hacer estas pruebas, esta semana estamos yendo a un centro de salud infantil que nos recomendaron en el departamento de educación.

Un lugar lleno de televisiones y juegos para niños... afortunadamente, porque esta  tarde hemos estado tres horas allí y hemos sido los últimos. Cuando nos íbamos Diego ha dicho bye bye a la enfermera que le ha pinchado. Y no ha llorado nada, tampoco sus hermanas ayer...bueno, sólo un poco de lágrima y algún mareo.

The big apple

Columbus Circle está en la esquina suroeste de Central Park y es un lugar lleno de turistas, puestos de venta de comida, un sitio donde se pueden alquilar bicicletas o puedes darte una vuelta por el parque en  un carruaje movido por un tipo en bicicleta (o caballos). Tenemos buena comunicación desde casa con el metro y es rápido. Hoy hemos llegado hasta allí para ir paseando hasta el extremo sureste del parque con la quinta avenida, y atravesándolo nos hemos encontrado con una zona de juegos alucinante, una especie de castillo lleno de canales de agua, surtidores, rocas como montañas, mini campos de fútbol, areneros...
.

Y la gran manzana nos ha atrapado en la tienda apple de la quinta avenida, sucumbiendo a su tentación.

Subway ( ll )

El metro en NY funciona de maravilla, aunque la gente en los vagones no habla, tampoco se ven grupos de amigos o padres con niños que vayan charlando. Los viajeros suelen ser partículas inmóviles desplazándose bajo tierra enganchadas a una iPad, iPod, libro electrónico, teléfono inteligente o cualquier artilugio parecido, que les aísla de sus acompañantes, y hace el viaje más corto.

Más de mil kilómetros de vías de tren, transportando a cinco millones de personas al día.

The land of difficult access

Hemos llegado hasta Wassaic en un cercanías de la red de trenes de NY. Allí nos esperaba el colega de Concha con el que va a trabajar durante estos meses, un tipo estupendo. Tanto él, como su mujer y su hijo de siete años nos han tratado fenomenal y han sido muy amables.

Ellos tienen una casa cerca de Wassaic, en el lago Hunns, un sitio alucinante donde la gente no cierra las puertas de sus casas, todos se conocen y hacen hogueras por la noche donde charlan y comparten tartas caseras y bebida. El lago es un remanso de paz donde nos hemos bañado y  hemos navegado con tablas de windsurf y kayak. También hemos hecho de ciclistas ocasionales y hemos comido de maravilla en nuestro primer fin de semana fuera de la ciudad.