sábado, 28 de julio de 2012

The rain

Ya en el piso.

Cansados después de tantas horas, hablamos de nuestro pequeño paseo por las calles de alrededor. Decimos que se respira un cierto aire africano, venta en la calle, olores y colores llamativos y la gente se saluda (incluso nos han saludado a nosotros - los niños ayudan a sociabilizarse..jeje.-).
Además de todos los estereotipos que podamos tener del Harlem: afroamericanos en grandes coches con rap o hip hop a todo volumen, o sentados sobre las escaleras que hacen de entrada a sus casas, grandes mujeres paseando a sus hijos hablando alto y un ir y venir de tipos raros (en su vestimenta, en su peinado, en sus andares...)

Hace calor, pero ahora ha refrescado por la lluvia que ha caído en unos minutos. De hecho, cuando salíamos por la puerta ha empezado a llover y nos hemos tenido que dar la vuelta. Pero después, como siempre, ha escampado.


Fotos desde el salón del piso

viernes, 27 de julio de 2012

The first

La primera nos ha pasado antes de empezar.

Hemos llegado bien al aeropuerto en autobús desde Zaragoza (gracias a  los que nos han llevado a Delicias, os queremos un montón), directos a la T4, un buen viaje con Diego dormido casi todo el trayecto.

Pero cuando hemos ido a facturar, lo pensamos así para tener tiempo mañana e ir más tranquilos, resulta que nuestro vuelo "no existía"...¿Cómo? ¿Qué?... resulta que Iberia trabaja con American Airlines muchos vuelos y uno de esos es este. Así que sí, sí que existe, pero no hemos podido facturar, American Airlines no estaba abierto y nos tocará mañana madrugar y hacer colas y... en fin, ahora estamos en un hostal cerca del aeropuerto, Diego está viendo la tele, la gente duchándose y luego a cenar.



La vida es maravillosa ¡¡¡

Things I'll miss

Las comidas en familia, el huerto de mis padres,... y esa fiesta que será sus bodas de oro.

miércoles, 25 de julio de 2012

Crime

Hay una página web que indica cuántos y qué tipo de delitos se van produciendo en cada zona urbana, da un poco de respeto mirar desde aquí esas estadísticas. Aunque es verdad que el desconocimiento produce temor, el hecho de que las armas se puedan conseguir fácilmente en ese país me causa cierta desazón...